¿Qué siento después de recibir un masaje?
Muchos de nuestros pacientes nos comentan que después del tratamiento de fisioterapia se han encontrado mal, se han encontrado cansados, doloridos e incluso se han sentido peor que cuando entraron en consulta. Todos estos síntomas son normales y temporales, por lo que no debes preocuparte si es lo que sientes después de un tratamiento de fisioterapia.
¿Quieres saber qué le pasa a tu cuerpo?
El masaje activa la circulación.
El masaje activa los sensores térmicos y nerviosos de la piel.
El masaje aumenta el riesgo sanguíneo, lo cuál facilita que se recupere nuestro tejido muscular dañado. Por eso, nuestra piel se enrojece y sentimos mucho calor.
El masaje relaja las fibras musculares y quita la tensión del mismo.
El masaje aumenta las defensas de nuestro sistema inmunitario.
El masaje baja los niveles del cortisol.
¿Qué sería conveniente hacer después de un masaje?
Lo ideal es hacer lo que nos recomienda el fisioterapeuta.
En cada caso, habrá que seguir unas pautas de aplicar frío o calor dependiendo de nuestra lesión muscular.
Aunque en cualquiera de los casos lo recomendable es no practicar deporte después del masaje. La mejor actitud es estar tranquilos, beber mucha agua y reposar. Se recomienda dejar a nuestro cuerpo digerir el masaje y responder al tratamiento.